No, las condiciones de trabajo se establecen de mutuo acuerdo cuando firman el contrato de trabajo. Para resolver tu situación, puedes acudir ante la autoridad laboral en un término de dos meses.

No, el horario de trabajo se acuerda entre tú y tu patrón al momento de celebrar el contrato de trabajo, y no podrá extenderse posteriormente. Dicho horario no podrá ser mayor a lo que establece la ley, el cual enlistamos a continuación:

• Para la jornada diurna (entre las 6:00 a.m. y las 8:00 p.m.), la jornada máxima es de 8 horas.
• Para la jornada nocturna (entre las 8:00 p.m. y las 6:00 a.m.), la jornada máximo es de 7 horas.

Cuando trabajes horas extra, se te pagarán al doble las primeras 9 horas que labores semanalmente. Y si son más de 9 horas a la semana, las posteriores se te pagarán al triple. El conteo de horas extra se reinicia cada semana.

No. La ley establece que por cada seis días de trabajo, tienes derecho a por lo menos un día de descanso pagado.

Tu patrón debe procurar que tu día de descanso semanal sea el día domingo. Pero, si eso no es posible, entonces debe darte un día de descanso entre semana y pagarte una prima dominical correspondiente al 25% extra de tu salario diario.

El derecho a contar con un periodo de vacaciones se genera después de que cumples el primer año de servicios. Este periodo aumenta conforme a tu antigüedad dentro de la empresa. A continuación te anexamos una tabla en la que se ejemplifica el periodo de vacaciones a que tienes derecho según los años de labores cumplidos:

Tu patrón te debe conceder tus vacaciones dentro de los seis meses siguientes a la fecha en que cumplas años de servicio prestados.

No. Tus vacaciones siempre deben ser pagadas. Y el pago deberá realizarse un día antes de que empiecen tus vacaciones.

Puedes reclamar su pago en juicio. Sin embargo, es importante que sepas que solo podrás reclamar el pago de las vacaciones del último año laborado. Las vacaciones que no reclames en el plazo de un año se pierden y ya no podrán reclamarse después.

Tu patrón tiene hasta el 20 de diciembre para pagarte tu aguinaldo, correspondiente a 15 días de salario.

Aunque es una práctica común en muchas empresas, es ilegal. Por tanto, en caso de ser despedido o de que se nieguen a pagarte tus prestaciones, podrás demandar tus derechos con la totalidad de tu sueldo.

Se trata de una retribución adicional al salario que debe pagar tu patrón durante el mes de mayo de cada año. Es un derecho laboral que reconoce la contribución de los trabajadores a la generación de ganancias en la empresa.

Cuentas un año para reclamar su pago en juicio.

Se trata de la protección a la que tienen derecho los trabajadores en materia de salud y economía, a través de programas e instituciones públicas. La Seguridad Social abarca:

• Riesgos y accidentes de trabajo;
• Enfermedades generales y maternidad;
• Prestaciones en especie y en dinero;
• Servicios Médicos; y
• Pensiones.

Tu patrón tiene la obligación de entregarte el documento de tu alta ante el IMSS, para que puedas acudir a tu clínica más cercana a registrarte. Sin embargo, también puedes consultar tu vigencia de derechos en el sitio web del IMSS, en el siguiente vínculo https://serviciosdigitales.imss.gob.mx/semanascotizadas-web/usuarios/IngresoAsegurado

No. Aunque la empresa tiene la obligación de conservarte dado de alta en el seguro social durante todo el tiempo que te encuentres laborando, la duración de tu relación de trabajo y tu alta en el seguro social son cosas independientes. Sin embargo, es ilegal que tu patrón te dé de baja en el IMSS cuando aún continúas laborando.

Puedes presentar una denuncia ante el IMSS o ante la STPS, con el objeto de qué requieran a tu patrón para que cumpla con su obligación de brindarte seguridad social. Éstas denuncias pueden ser anónimas.

Es cualquier lesión que sufras durante el desarrollo de tu trabajo o en los trayectos de traslado desde tu casa hasta el trabajo.

El IMSS es la autoridad facultada para determinar si el accidente que sufriste es o no “de trabajo” para efecto de pagar las indemnizaciones o pensiones que procedan. Sin embargo, si no estás conforme con la calificación que realizó el instituto, podrás hacerlo valer a través de un juicio laboral ante las Juntas de Conciliación y Arbitraje.

Debido a que es obligación de tu patrón inscribirte al Seguro Social, será él quien deba cubrir todos los gastos resultantes de tu accidente de trabajo.

Si estás inscrito en el Seguro, será el IMSS, el encargado de tu hospitalización, atención médica, recuperación, rehabilitación y pensión en caso de ser necesario. En caso de que no estés inscrito en el IMSS, tu patrón deberá hacerse cargo de todos los gastos que deriven de tu accidente de trabajo.

En este caso, el despido que sufriste es injustificado y por tanto puedes reclamar ante las Juntas de Conciliación y Arbitraje que tu patrón te pague las indemnizaciones de ley o te reinstale en tu trabajo.

Los requisitos para poderte pensionar dependerán de la fecha en que comenzaste a cotizar. Si comenzaste a cotizar antes del 1 de julio de 1997, te aplicarán los beneficios del esquema de pensiones de la Ley del Seguro Social de 1973. Si comenzaste a cotizar después del 1 de julio de 1997 entonces te aplicará la ley vigente a partir de 1997. Sin embargo, en términos generales necesitas tener por lo menos 60 años de edad (para pensión por cesantía en edad avanzada) y 65 años para la pensión por vejez (que es un poco más alta que la de cesantía). Asimismo, deberás contar con al menos 500 semanas cotizadas (si te aplica la Ley de 1973) y 1250 semanas cotizadas, en caso de que te aplique la Ley de 1997. Además de estos, existen otros requisitos para poder tramitar tu pensión por lo que te recomendamos contactarnos para recibir una asesoría personalizada.

Si el despido fue injustificado, puedes demandarlo ante las Juntas de Conciliación y Arbitraje para que te reinstale en tu puesto y continúes cotizando para lograr la semanas necesarias para tu pensión. Aunque también existen otras alternativas para completar las semanas necesarias para tu pensión, por lo que te recomendamos contactarnos para recibir una asesoría personalizada.

• Durante tu embarazo, no se te exigirá la realización de trabajos que exijan esfuerzos considerables y signifiquen un peligro para tu embarazo. Por ejemplo, levantar, tirar o empujar grandes pesos, estar de pie durante largo tiempo o cualquier actividad que pueda alterar tu estado emocional.
• Tendrás derecho a seis semanas de descanso anteriores al parto y seis semanas posteriores al mismo.
• Durante este periodo de incapacidad recibirás el pago de si salario íntegro por parte del IMSS.
• Durante el período de lactancia (seis meses posteriores al parto), tendrás derecho a dos reposos extraordinarios por día, de media hora cada uno. O bien, puedes acordar con tu patrón que se reduzca en una hora tu jornada de trabajo.
• Tienes derecho a regresar al puesto que ocupabas, siempre y cuando no haya pasado más de un año de la fecha del parto; y
• A que se computen en tu antigüedad los períodos pre y postnatales.

• Durante tu embarazo, no se te exigirá la realización de trabajos que exijan esfuerzos considerables y signifiquen un peligro para tu embarazo. Por ejemplo, levantar, tirar o empujar grandes pesos, estar de pie durante largo tiempo o cualquier actividad que pueda alterar tu estado emocional.
• Tendrás derecho a seis semanas de descanso anteriores al parto y seis semanas posteriores al mismo.
• Durante este periodo de incapacidad recibirás el pago de si salario íntegro por parte del IMSS.
• Durante el período de lactancia (seis meses posteriores al parto), tendrás derecho a dos reposos extraordinarios por día, de media hora cada uno. O bien, puedes acordar con tu patrón que se reduzca en una hora tu jornada de trabajo.
• Tienes derecho a regresar al puesto que ocupabas, siempre y cuando no haya pasado más de un año de la fecha del parto; y
• A que se computen en tu antigüedad los períodos pre y postnatales.